Koke rechaza una proposición de Silvia para proteger a un jovencísimo rey egoista y consentido de un grupo de asesinos. Además, tiene hasta su propio harem y ha puesto en su punto de mira a Silvia. Koke sólo acepta el trabajo cuando recibe un permiso especial para visitar el harem de su majestad, a cambio de protegerle.