Goku vuela junto con Upa de regreso a su hogar, en las cercanías de la Torre Sagrada de Karin. Goku convoca al Dragón Shenron y Upa solicita que su padre sea resucitado. El Dragón concede el deseo y Bora se levanta de su tumba. Antes de que las Bolas se dispersen por la Tierra, Goku agarra la de cuatro estrellas, ya convertida en piedra. Al volver con sus amigos, Roshi dice que no tiene nada más que enseñar a Goku, así que éste, sin su Nube Kinton, decide entrenarse por su cuenta hasta el próximo Torneo de Artes Marciales, donde todos participarán.