Tanguy, de 44 años, regresa a la casa de sus padres 16 años después de irse, con su hija Zhu bajo el brazo porque Meï Lin lo dejó. Decepcionados por ver a su "pequeño" en este estado, Paul y Edith hacen todo lo posible para que se sienta a gusto, sin darse cuenta de que al hacerlo, trenzan una cuerda para colgarse más a ellos porque Tanguy empieza a sentirse bien con sus padres.